El panorama de seguridad en Chile ha cambiado drásticamente en los últimos años. El aumento de la delincuencia, los robos con violencia y la sensación de inseguridad han llevado a que empresas de todos los sectores refuercen sus medidas de protección. Como resultado, la demanda por servicios de seguridad privada ha crecido exponencialmente, convirtiéndose en un pilar fundamental para la operatividad y continuidad de los negocios.
La percepción de inseguridad es un factor clave en esta tendencia. Según la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (ENUSC), el 90% de los chilenos considera que la delincuencia ha aumentado en el país. Las empresas, tanto grandes como pequeñas, no son ajenas a esta realidad y han debido tomar medidas preventivas para resguardar su infraestructura, activos y personal.
Uno de los motivos por los cuales las empresas están confiando cada vez más en la seguridad privada es la especialización de los servicios. Ya no se trata solo de tener guardias en los accesos, sino de implementar estrategias integrales que incluyen tecnología avanzada, monitoreo en tiempo real, control de acceso digital y análisis de riesgos. Los avances en videovigilancia, inteligencia artificial y sistemas biométricos han permitido que las empresas puedan gestionar la seguridad de manera más eficiente y con mayores niveles de precisión.
El costo de no invertir en seguridad privada puede ser aún más alto que el de contratar estos servicios. Un solo evento delictivo puede generar pérdidas millonarias para una empresa, sin contar el daño reputacional y la pérdida de confianza de clientes y colaboradores. Según cifras del Ministerio del Interior, los robos en locales comerciales aumentaron en un 35% en 2023, lo que ha llevado a las empresas a reforzar sus estrategias de prevención y protección.
El crecimiento de sectores estratégicos como la minería, el retail, la banca y la logística ha impulsado aún más la contratación de seguridad privada. Estos rubros manejan grandes volúmenes de activos y están expuestos a riesgos constantes, por lo que requieren soluciones a medida que garanticen la continuidad operativa. En este sentido, contar con un equipo de guardias capacitados, con certificaciones OS-10 y respaldados por protocolos de acción específicos, se ha vuelto una necesidad más que un lujo.
Otro punto clave es la flexibilidad que ofrecen las empresas de seguridad privada. A diferencia de las fuerzas públicas, estos servicios pueden adaptarse a las necesidades de cada cliente, ofreciendo soluciones personalizadas que van desde patrullajes móviles hasta equipos de reacción rápida en caso de emergencias. Esta capacidad de respuesta inmediata ha sido uno de los factores determinantes en el aumento de la confianza empresarial en la seguridad privada.
En un contexto donde la incertidumbre y la inseguridad siguen en aumento, externalizar la seguridad con empresas especializadas no solo representa una solución eficaz, sino también una estrategia de inversión inteligente. En Genprot, entendemos los desafíos que enfrentan las empresas en Chile y ofrecemos soluciones de seguridad adaptadas a cada necesidad. Desde vigilancia 24/7 hasta tecnología de última generación, nuestro objetivo es proteger lo que más importa.
Si su empresa aún no ha reforzado sus protocolos de seguridad, el momento de actuar es ahora. Contáctenos hoy mismo y descubra cómo podemos ayudarle a fortalecer la seguridad de su negocio y prevenir riesgos antes de que sea demasiado tarde.a.
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